Sin lugar a dudas el hecho histórico de la Batalla de Bailén de 1808 constituye un acontecimiento crucial en la historia del municipio.
Tal es así, que con este itinerario retrocedemos doscientos años atrás para realizar el mismo recorrido que las tropas españolas hicieron hasta el campo de batalla para enfrentarse con el poderoso ejército de Napoleón.
Todas las referencias las encontraremos en el Museo de la Batalla de Bailén, emplazado en el mismo lugar en el que se estableciese el hospital de sangre durante la contienda, y desde el cual iniciaremos el recorrido, que finalizará en el momento en el que alcancemos el enclave donde se desarrolló la histórica batalla.
Este llamativo edificio, de construcción relativamente reciente, recrea en planta una gigantesca pieza de artillería: el cañón, en clara alusión al arma protagonista durante la contienda. En sus jardines anexos, dos bóvedas pareadas simulan la munición en este singular inmueble.
Una vez en su interior y a través de su Exposición Permanente, el visitante se dispondrá a revivir un acontecimiento que claramente cambiaría el rumbo de Europa.
Sus salas muestran de forma amena y didáctica, los inicios y las causas de la Guerra de la Independencia, los ejércitos enfrentados, su armamento, la organización política, los personajes más reseñables y, como no, el papel decisivo que Bailén y sus habitantes desempeñaron en tan rememorada batalla. Un discurso expositivo elaborado siempre desde una óptica neutral, que lejos de hacer apología del acontecimiento bélico, busca su análisis objetivo, a través de virtudes como la solidaridad, la convivencia, la tolerancia, la democracia y la libertad.
En nuestro ascenso por la calle Pérez Galdós nos toparemos con la Ermita de la Limpia y Pura, testigo de lo sucedido aquel Martes, 19 de julio de 1808 en Bailén. Las tropas españolas desfilaron a su lado hasta alcanzar el lugar desde donde se defendieron de las ofensivas francesas.
Custodiándola, se encuentra el conocido Paseo de las Palmeras, con el Monumento Conmemorativo a la Batalla de Bailén, en memoria del histórico acontecimiento.
Nuestro camino nos llevará por la calle Andújar hasta alcanzar el final del recorrido, cuando visualizamos la Huerta de San Lázaro o Huerta del Sordo, un Bien de Interés Cultural con categoría de “Sitio Histórico”, en el que se encuentra la vieja noria, que nos revelará los secretos de todo lo acontecido.
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