Las aguas del estanque del Parque Eduardo Carvajal, conocido como “El Vivero” contaban con una pequeña población de carpas japonesas, muy llamativas para todo aquel que se acercaba a este espacio. Este mural recuerda aquellos peces y alude a una problemática de especial relevancia en la actualidad como es la de la delas especies exóticas […]
Coordinado por Boa Mistura, en este mural colaboraron en torno a 600 personas de diversos centros educativos, asociaciones y otros colectivos. En él, una frase que habla de la necesidad de unir ciencia y arte, que habitualmente se percibe como disciplinas separadas por barreras inexistentes, adquiere el mayor protagonismo.