El 22 de julio, en la Casa de Postas del Camino Real, en una humilde venta en las proximidades de Villanueva de la Reina, tuvo lugar la firma de las capitulaciones, procediéndose al día siguiente en el campo de batalla a la rendición de honores por parte del ejército francés al español.
Esta victoria supuso una nueva esperanza para España y el principio del fin del reinado de Napoleón en Europa, a pesar de que la Guerra de la Independencia se extendería seis años más.
Fernando VII fue puesto en libertad, siendo recibido a su vuelta con entusiasmo por el pueblo español, a quien llamaron “El Deseado”. Entre tanto, en 1812 se produce un nuevo hecho histórico, al reunirse las Cortes de Cádiz para elaborar la primera Constitución en España, conocida popularmente como “La Pepa”.
Numerosos fueron los reconocimientos para Bailén por esta heroica gesta, como fueron el título de “Muy Noble y Leal” obtenido en 1890 o el rango de Ciudad, concedido en 1850, exigiéndose por la Reina Isabel II que todas aquellas ciudades de más de 10.000 habitantes debían denominar con el nombre de Bailén a una de sus tres principales calles.